Sunday, September 10, 2006

GUERRA, EMPLEO E INDOCUMENTADOS



Yo recojo lo del pasado lo que para el presente es un motivo de información. Por ejemplo, en el siglo IV, en Roma, ya no había soldados romanos para defender sus dominios, y fue necesario alquilar pueblos bárbaros; darles el equipo para defenderse de los otros bárbaros. Luego llegó Aquiles y entró a Roma, y la saqueó. O sea, que llega un momento en que el refinamiento intelectual, el bienestar de la economía, de la cultura, etcétera, por necesidad histórica, por fatalidad, determinismo voluntarista, o por lo que sea, trazan hacia otros rumbos, dan otros giros inesperados.
Y si las cosas son así, pues para la próxima guerra de los norteamericanos, en su afán de conseguir más petróleo en algún pueblo de Sudamérica o África, va a ser necesario que lleven soldados de Centroamérica, de Asia, o de alguna otra parte, porque los norteamericanos ya no van a querer hacer tal cosa. Si los norteamericanos negros, en estos momentos, ya no quieren asolearse en la agricultura. Son los de Centroamérica, los mexicanos, los haitianos, y demás, quienes se encargan de realizar labores pesadas y de riesgo.
Hay países enteros que viven exclusivamente del dinero que mandan sus indocumentados. Y los indocumentados empiezan a transformarse en un problema grueso, en Francia, en Italia, en Alemania, en España.
La masa del pueblo, ignorante, inculta y demás cosas, no pide permiso, y no le importa, incluso, morir con tal de conseguir un empleo.