
«Yo le tengo a Campbell mucha estima personal. Lo conocí cuando estaba muy jovencito. Me acuerdo que estábamos en un café, platicando un amigo mío y yo, y llegó Campbell y nos dijo que se iba a suicidar. Tenía él como unos 17 o 18 años. Nos pusimos a platicar con él, largamente. Andaba muy triste. Nos pareció que el muchacho estaba pasando por un momento de gran angustia. Supimos que después se fue a Sonora». [6 de mayo de 2004].