
A los rosaritenses les repugnan las maquiladoras porque están llenas de gente chaparra, prieta y venida del interior del país. Y es que Rosarito está habitado por norteamericanos —güeros— para quienes esas cosas prietas y esas chambitas tan miserables se ven mal. Eso a mí no me gusta.
En Ensenada sucede algo así por el estilo, nada más que allí andan tan tronados que ya quisieran una maquiladora •